Simó decide recluirse en su casa a modo de ermitaño de ciudad. Su única conexión con el exterior es Shahrukh, el indio que le hace la compra y Beré. Articulado en forma de mujer, amiga, ex -novia, gran amor y cuenta pendiente, Beré es precisamente el caos del mundo que no consigue ni ordenarse, ni entenderse. Las idas y venidas de Beré al apartamento de Simó son intentos de conectar. “Sé de un lugar” es la historia de una pareja que no se encontró. Y cuándo algo que tiene que ocurrir, no ocurre; vamos y volvemos por una inercia que se nos escapa.
Algo de la obra me sigue dando vueltas. Esa dificultad para tener intimidad con las personas que más queremos. Quizá las trabas de Beré y Simó son las de toda una generación tan ensimismada que tiene miedo de vivir y de amar; que prefiere flagelarse en la soledad o desparramarse coleccionando momentos.
El montaje, con muchísima sencillez, consigue una cercanía canalla con el público. Alivia con inteligencia, humor y complicidad ciertos momentos más complejos del texto.
Los tres años de recorrido de la obra, la han hecho crecer en todos sus aspectos técnicos y artísticos y la han colocado dónde merece. Ojalá venga muchas cosas de Prisamata paridas con sinceridad y criadas en las manos del tiempo.
Nota melómana: Lo de Triana es impagable.
De 4 a 21 de septiembre – 21h.
de jueves a domingo
Texto y dirección: Iván Morales
Intérpretes: Anna Alarcón, Xavier Sàez
Precio: 14€
