“El arte, cuando es bueno, es siempre entretenimiento”. Bertolt Brecht.
Porque asistir hoy en día a una función donde el respetable no pare de reírse a carcajadas y olviden sus problemas, los recortes y demás circunstancias sociales que nos tocan vivir, es impagable. Si además es para ver un trabajo muy digno que además nos aporta historia, nuestra historia, la de nuestras madres y abuelas y todo esto por el módico precio de un par de eruros más que lo que cuesta una entrada al cine…¿a qué esperamos para ir al teatro?.
Para ser sincero aquí un servidor es de los que piensa, que hacer reír es muchísimo más difícil que hacer llorar, y que la comicidad, es algo reservado “generalmente” al género masculino y que pocas son las féminas que tienen ese don, aunque haberlas haylas, claro está. Pues bien, en esta obra con dirección de Quino Valero se han reunido tres fantásticas cómicas, Llum Barrera, Mariola Fuentes y Natalia Hernández (sin dejar de mencionar el impresionante trabajo que hacía Cristina Alcázar sustituyendo a Mariola) para interpretar, aunque viéndolas se podría decir jugar o disfrutar, encarnando diferentes personajes femeninos de la España franquista y retratar a la mujer desde 1934 hasta 1977 aproximadamente.
Doce historias de diferentes autores que bien podrían ocurrir en el salón de la casa de nuestros abuelos, con esas paredes empapeladas con aquél papel de flores que hoy nos chirría tanto a la vista y que nos aportan una visión cómico-histórica de las dos Españas, retrato de la censura incluido y que nos traen hasta las ya olvidadas alemanas descocadas de los años 70, antítesis de la mujer española que con tanta devoción seguía el lema de la “triple s”, o sea, sumisión, servicio y sacrificio y nos muestra la santa paciencia que tuvieron nuestras predecesoras a la hora de abordar temas como la religión, el sexo, los maltratos o el santo matrimonio sin olvidar la Sección Femenina de la Falange española y que estas tres actrices entregadas a su labor nos recrearán en tono de sátira, para hacernos pasar un rato de lo más agradable. Cabe destacar que sin ser cantantes, cantan y lo que es más importante, afinan, e incluso cantan a voces haciendo fáciles armonías destacando eso sí, a Llum Barrera en esta faceta.
Para los más mayores, un flashback en toda regla, una vuelta a su niñez, una visión desde el presente al pasado que ya queda muy, muy lejano por suerte para todos y todas.
Para los más jóvenes, una lección de vida e historia, un claro ejemplo de que cualquier tiempo pasado siempre fue peor y no como rezaba la famosa canción de Karina.
Y recuerden que… el espectáculo siempre debe continuar.
¡Arriba el telón!
“Manual de la buena esposa”. 2ª temporada
Teatro Lara
Intérpretes: Llum Barrera, Mariola Fuentes, Natalia Hernández.
Dirección: Quino Valero.