Después del éxito conseguido con El Rei Lear, Lluís Pasqual vuelve como director de un nuevo montaje de gran formato en la sala principal del Teatre Lliure. Esta vez, con dos hombres como protagonistas: el autor Eduardo de Filippo i el actor Jordi Bosch.
Pasqual presenta dos comedias con acento y música napolitana. Estas son las únicas coincidencias entre las dos. El primero de los textos, Home i senyor, obra de unos 20 minutos interpretada por 4 actores, resulta bastante innecesario. En él, una triste compañía ensaya su obra después de un estreno deplorable y vive una serie de malentendidos e incongruencias llenos de gags tan simples como superficiales. El montaje de Pasqual está lleno de gritos y estridencias que impiden que la conexión con la obra se dé desde el principio.
La tónica cambia con La gran il·lusió, el verdadero centro del espectáculo. Una obra que sin dejar la comicidad tiene un sentido más profundo. Un hombre es abandonado por su mujer durante un espectáculo de ilusionismo. Otto Marvuglia, el prestidigitador, le hace creer que los siguientes 4 años sin su esposa son solamente una ilusión y que, cuando termine, volverá a la realidad y nada habrá sucedido. En un mundo cada vez más avanzado y difuso como el nuestro, certeza y ficción se solapan y nos confunden constantemente. ¿Qué es verdad y qué es mentira? ¿Podemos vivir en el engaño? ¿Acaso el propio teatro no es más que una farsa necesaria?
Jordi Bosch pierde aquí parte del histrionismo que acostumbran a presentar sus interpretaciones y defiende con soltura el papel de ilusionista timador. Comparte protagonismo con él Ramon Madaula, actor que después de su aclamado conde de Kent en El rei Lear vuelve con fuerza e intensidad en el abismo de su personaje hacia la locura. Acompañan al dúo un total de 8 actores de renombre como Mercè Sampietro, Laura Aubert, Marc Rodríguez o Teresa Lozano con intervenciones muy minoritarias.
Pasqual aprovecha las posibilidades técnicas de la sala para presentar una puesta en escena de nivel. Sin elementos de grandes dimensiones, proyecciones, luces y espacio quedan constituidos de forma imponente y refuerzan la idea de la atmósfera mágica sobre la que se viste la historia. Además, el espectáculo cuenta con música en directo al estilo napolitano: Tres músicos y la polifacética Aubert al violín amenizan los cambios entre escenas llevándonos a Italia.
A teatro con Eduardo se convierte en una apuesta entretenida y amenizada. Estéticamente cuidada e interpretativamente correcta. Lástima de que le sobren los primeros 20 minutos.
A teatro con Eduardo: Home i senyor y La gran il·lusió de Eduardo de Filippo.
Dirigida por Lluís Pasqual
Interpretada por Laura Aubert, Jordi Bosch, Robert González, Oriol Guinart, Teresa Lozano, Ramon Madaula, Francesca Piñón, Albert Ribalta, Marc Rodríguez y Mercè Sampietro.
Música en directo interpretada por Laura Aubert, Robert González, Pablo Martorelli yCarles Pedragosa – Roman Gottwald.
Hasta el 1 de mayo en el Teatre Lliure