Concha Velasco vuelve al teatro Goya para presentar en la ciudad condal Olivia y Eugenio, un texto de Herbert Morote en el que la actriz interpreta una enferma terminal cuyo hijo tiene Síndrome de Down. Durante la obra, la protagonista rememora la vida junto a su hijo al que de entrada rechazó y se plantea el suicidio, llevándose con ella al chico que no cree que pueda sobrevivir sin su madre.
La principal particularidad del montaje es que la actriz comparte el escenario con Rodrigo Raimondi – hijo del tenor Ruggero Raimondi que en palabras de Velasco “se ha criado en los camerinos” o Hugo Aritmendiz–depende de la función-, dos chicos que padecen la síndrome. “Trabajar con unos actores Down ha sido todo un reto. Se podría haber hecho con caracterización, pero mientras yo estaba en la cama, aprovecharon el tiempo yendo a colegios a buscar chicos para interpretar el papel”, cuenta la actriz.
Un reto dificil
Velasco destaca la dificultad del reto que le ha supuesto, puesto que trabajar con ellos la obliga a prestar mucha atención. Sin embargo, la actriz se muestra muy satisfecha con el trabajo realizado: «És un texto precioso, muy emotivo, al que los chicos le dan una verdad extraordinaria que se transmite y yo no me puedo quedar atrás”. Y cuando habla de sus compañeros de escena, va más allá. «Son buenos por naturaleza, inteligentes y excepcionales”, afirma.
Para el director del Goya y amigo de la protagonista Josep Maria Pou, cada uno de los chicos que interpreta el papel crea un nuevo Eugenio. “Tienen peculiaridades distintas y de su interpretación salen dos obras. Hay mucha gente que la ha visto dos veces por lo menos. Yo os propongo repetir también“, dice.
Próximos proyectos
A sus casi 76 años, Velasco se muestra totalmente recuperada y ávida de nuevos proyectos. Adelanta el próximo: “Me han propuesto un monólogo de Ernesto Caballero sobre Juana la Loca”. En él, cuenta, interpretará a la reina de Castilla y Aragón en sus últimos años de vida y estará dirigida por Gerardo Vera.
Posteriormente, tiene pendiente trabajar junto a Pou. “Nos han quitado ¿Quién teme a Virginia Woolf?, que era una cosa que quería hacer con Jose María”, explica Velasco. «La he dirigido, pero nunca he actuado con ella y tenemos muchas ganas de hacerlo”, reafirma Pou.
